Instalado en Manchester como uno de los pilares de la defensa del City de Pep Guardiola, Nicolás Otamendi no deja de sorprender con sus actuaciones que hoy lo ubican entre los mejores defensores del mundo y le han dado la posibilidad de ocupar un lugar en la saga central de la Selección Argentina.
Desde muy chico, el defensor argentino se acostumbró a pelear para llegar a ser jugador de fútbol. Su sueño. Apenas si tenía tiempo, al salir del colegio, de recoger el sandwich que su madre Silvia le alcanzaba para que comiera mientras viajaba al predio de Vélez en Liniers desde el Talar de Pacheco: “es un orgullo que haya llegado después de tantos años” le decía a La Nación en 2009. Tiempo después, Otamendi seria parte del conjunto dirigido por el Flaco Gareca que se alzó con el título en el Clausura 2009.
El saguero del Manchester City, tiene una particularidad en su juego. No es de esperar al rival sino que busca siempre anticiparse y dar el golpe que lo haga de la pelota: …“la anticipación es mi imágen de marca” (Revista Dragones Porto FC) . Esa particularidad en su juego no es casualidad. Nicolás concurrió en su adolescencia junto a su primo a un gimnasio de boxeo en el barrio La Paloma del Talar de Pacheco. Durante un año se dedicó a entrenar y, aunque no llegó a competir, su despliegue físico más adaptado al estilo del boxeador que intercambia golpe por golpe le permitió fortalecer su cuerpo y trabajar sus reflejos (superdeporte, Valencia FC). Si bien tuvo la posibilidad de seguir con el boxeo, se decidió por el fútbol y el tiempo le daría la razón.
Pasó por Vélez donde disputó 41 partidos y llamó la atención no solo de distintos clubes europeos sino también del entonces seleccionador nacional Diego Armando Maradona quien lo llevó al mundial de Alemania.
Otamendi siguió su carrera en el viejo continente, en el Porto FC club que confió en las cualidades que Nicolás supo exponer para la revista El Gráfico el 11/08/2009: “Me considero un central ágil al que le gusta salir tocando y no reventarla. Si bien no soy tan alto, pierdo poco de cabeza. Tiendo a marcar de perfil al atacante porque tengo más chances de ganarle la posición. Prefiero achicar hacia adelanteen sentido de los costados, ya que obtengo más tiempo para sacar al rival hacia afuera y que lleguen los laterales. Cada partido para mi es una final” en el club luso jugó desde 2010 hasta 2014.
El zaguero argentino fue perfilando su carrera como para dar el salto a uno de los grandes de Europa por sus actuaciones en Portugal y el Valencia de España se fijó en él y pagó los 12 millones de euros correspondientes a su pase en febrero de 2014, aunque el destino le jugaría un mala pasada, la falta de cupos de extranjeros en el equipo valencista provocaron su cesión al Atlético Mineiro. Su regreso a mediados de ese año lo ubicó junto a Mustafi enla saga central del conjunto en el que alguna vez brilló Mario Alberto Kempez y se convirtió en una pieza fundamental del equipo.
Su familia aún vive en La Paloma y en el barrio lo recuerdan con orgullo: … “de chico lo veías con la mamá de acá para allá, cada vez que viene al país se reserva un día para sacarse fotos, firmar autógrafos y traer regalos para los chicos. El barrio lo adora” dice Vicente Maciel de La Paloma a Clarín.
Otamendí creció en su juego y despertó el interés de uno de los clubes más poderosos de la Pemier Lague, El Manchester City. Su profesionalismo fue un pilar en su vida y así lo detalla Diego Olivera, vecino del barrio de La Paloma (Clarin) donde aún hoy recide su familia: “cuando era joven y jugaba en Vélez, los amigos encaraban para el boliche de acá y el se iba a descansar porque entrenaba al otro día. Siempre profesional. Es un excelente representante. Confiamos en él”.
“Tenemos un Superman con Otamendi” dijo Pep Guardiola de Nicolás Otamendi luego de que el central argentino sacara en la línea una pelota que le permitió a su equipo derrotar al Newcastle por uno a cero. Luego lo mantuvo durante toda la temporada en la saga central del conjunto inglés que batió todos los records de la premier al llegar a 100 puntos en el torneo inglés.
Nicolás Otamendi se encuentra hoy considerado entre los mejores centrales del mundo y mucho tuvo que ver con su desarrollo aquella incursión en el mundo del boxeo que fortaleció sus músculos y mejoró su agilidad en el uno contra uno aunque muchas veces quede expuesto por ir a buscar al atacante.
Nicolas Lacunza
@Nico_Lacunza